El pasado 17 de mayo España depositó en Estrasburgo, en la sede del Consejo de Europa, el instrumento de ratificación de la Carta Social Europea Revisada de 1996, aceptando además el procedimiento de reclamaciones colectivas (Protocolo de 1995). Lo sucedido modifica completamente la posición de España respecto a la “Constitución social” europea porque pasamos de ser uno de los países más reticentes a profundizar nuestro compromiso a convertirnos en uno de los Estados más comprometidos, más de 25 años después y tras sucederse gobiernos de distinto signo político. En efecto, nos equiparamos con Francia y Portugal en la ratificación de […]